El filipino Manny Pacquiao humilló al 'Golden Boy' Oscar de la Hoya y le dio tal paliza que le mandó al hospital, en Las Vegas (Nevada). Pacquiao se burló de los pronósticos y con un boxeo rápido y preciso le dio una verdadera paliza al mexicanoestadounidense Oscar de la Hoya, para ganarle por nocaut técnico en el noveno de 12 asaltos de una pelea de los pesos welters.
El astro filipino partía por debajo en las apuestas pero demostró su gran calidad al ganar ampliamente todos los rounds y dejar a su rival con un rostro y el orgullo magullados. De la Hoya tuvo que ser trasladado al hospital central de Las Vegas para se sometido a exámenes médicos, lo que le impidió asistir a la conferencia de prensa posterior al combate.
Declaraciones triunfalistas. "La velocidad fue la gran respuesta de esta pelea. No estoy sorprendido por el resultado, pues me preparé bien para controlar la pelea desde un principio", dijo Pacquiao. "Estoy contento de darle esta victoria a mi país". El 'Pac Man' estableció la pauta de la pelea desde el campanazo inicial, y en el séptimo tuvo a De la Hoya a su merced en una esquina, pudiendo liquidar por KO. Ante el castigo, De la Hoya optó por no salir en el noveno asalto, diciéndole al árbitro Tony Week: "Freddy tenía razón, no tengo más nada", con lo cual le daba la razón al entrenador de Pacquiao, y ex preparador suyo, Fredie Roach, uno de los pocos que había pronosticado este triunfo del filipino.
El entrenador de De la Hoya, el mexicano 'Nacho' Beristaín, fue quien pidió al árbitro detener el ya desigual combate. "Estaba vacío, no tenia la fuerza suficiente para responder a Pacquiao. Nunca pudo anular la mano zurda de Pacquiao. Yo paré la pelea porque no quería que arrastrara su prestigio por el ring", indicó Beristaín
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